Ser gay en São Paulo
Esta semana São Paulo celebra el Día del Orgullo Gay con el mayor desfile del mundo, que tomará la Avenida Paulista durante el domingo. Entre 3 y 4 millones de personas pasarán en algún momento por esta gran fiesta para luchar por sus derechos y contra la homofobia, bajo un lema que este año es "Nací así, crecí así, y siempre seré así: Respétenme".
Como curiosidad, el desfile no ha sido ajeno a los problemas de corrupción del país: Petrobras, uno de los principales patrocinadores y en el ojo del huracán desde hace meses por la operación "lava-jato", ha reducido su aportación al evento.
En estas fechas se multiplican las actividades: debates, exposiciones, y un montón de actividades paralelas, pero São Paulo tiene un amplio circuito GLBT, aquí van algunas recomendaciones:
- El epicentro de la movida gay se sitúa en torno a la rúa de Frei Caneca, repleta de bares, discotecas como la emblemática A loca, restaurantes y otras tiendas enfocadas al público GLBT, a solo un paso de Paulista y rúa Augusta.
- El Largo de Arouche es otro de los referentes. Orientada a un público más joven, la plaza suele ser utilizada como punto de partida por centenares de personas, desde donde acercarse a algunas de las baladas de la zona.
- En cualquier zona de la ciudad puedes encontrar garitos gay-friendly. Para estar al día de bares, clubes nocturnos y restaurantes lo mejor es consultar alguna de las guías online especializadas, como la Guía Gay de São Paulo.
En São Paulo el ambiente es de tolerancia y normalidad respecto a la orientación sexual de las personas, sin embargo siguen produciéndose algunos episodios de discriminación y polémica, reductos de otra época y otra sociedad. Por ejemplo, hace unos meses se pidió el boicot de una telenovela por el beso que se daban dos mujeres ancianas. Más graves son algunos casos de violencia que se siguen registrando, y que no corresponden a lo que se vive en el día a día en la ciudad.
El desfile es un buen motivo para acercarse hasta São Paulo, una ciudad llena de vida y con una oferta cultural inabarcable. Merece la pena descubrirla.
